Azken eguneratzea urrian 30, 2023 arabera colgadosforelfutbol
A la tercera fue la vencida. Berak Barça logró a principios de los 90 su primera Europako Kopa (que era como se llamaba entonces) al vencer en Wembley , el estadio donde el Barça ganó la Champions en el 92 arabera 1-0 du Sampdoria con el famoso gol de Ronald Koeman de falta en el minuto 111 luzapenarena.
Aurretik, el conjunto culé, había perdido una final en 1961 haren aurka Benfica (3-2) y otra contra el Bukaresteko izarra urtean 1986 en Sevilla en la tanda de penaltis después de que le partido terminara con empate (0-0).
Wembley 92: La primera Copa de Europa del Barcelona
Es por ello que la final de Wembley cobró una importancia suprema para el Barça. El ‘Dream Team’ de Johan Cruyff comenzaba a forjarse y lograría 4 ligas de forma consecutiva pero, zalantzarik gabe, el gran título sería la Europako Kopa lograda en el mítico estadio inglés.
Arerioa, du Sampdoria de Pagliuca, Lombardo, Mancini o Vialli besteak beste, no lo puso nada fácil ya que, hasieran esan genuen bezala, el partido tuvo que resolverse en la prórroga gracias a un zapatazo de Ronald Koeman falta 9 minutu falta dira.
El camino a Wembley 92 para el Barcelona empezó con el gol de Bakero al Kaiserslautern
Baina inolako zalantzarik gabe, esta edición tuvo un verdadero punto de inflexión. Fue en el partido de vuelta de los octavos de final que enfrentó al Barça haren aurka Kaiserslautern.
En el partido de ida disputado en el Camp Nou, el conjunto blaugrana había logrado una cómoda renta de 2-0 por lo que viajaron a Alemania con mucha confianza en lograr la clasificación. Hala ere, los alemanes fueron muy superiores y lograron remontar y llegar al minuto 90 de partido con un resultado de 3-0 que les clasificaba y dejaba fuera a equipo de Johan Cruyff.
Fue en aquel preciso momento, prácticamente en la última jugada del partido, cuando llegó un gol tan importante o más que el logrado por Koeman urtean Wembley. Jose Mari Bakero con un fuerte cabezazo a pase del propio jugador holandés, berari 3-1 y el valor doble de los goles marcados en campo contrario permitía al Barça clasificarse in extremis.
Por supuesto que siempre se recordará a Ronald Koeman y su zapatazo terrible que significó el gol de la victoria en Wembley y como un nervioso Cruyff saltaba la valla para acceder al terreno de juego sabedor de que la Europako Kopa no se podía escapar de nuevo. Pero nadie debe olvidar que sin el gol de Bakero en el último segundo en aquella fría noche alemana habría sido imposible.