Txalo zaparradaz Camp Noutik irten zen Real Madrileko futbolaria

Txalo zaparradaz Camp Noutik irten zen Real Madrileko futbolaria
Cunningham en su partido contra el FC Barcelona en el Camp Nou (Aguantenche)

En un artículo anterior hablábamos sobre la vez que Maradona fue aplaudido por el público del Santiago Bernabéu. Hoy vamos a recordar el caso del futbolista del Real Madril que salió ovacionado del Camp Nou, el estadio del eterno rival merengue.

Berak 10 otsaila 1980 llegaba el conjunto blanco a Barcelona para disputar ‘El Clásico Espainiako futbola. En sus filas un joven británico de nombre Laurie Cunningham. El extremo izquierdo había llegado a la capital de España a razón de 195 milioi pezeta (el más caro de la historia del club en ese momento) nondik datorren West Bromwich Albion en el que había cuajado dos excelentes temporadas.

Formando en la delantera junto a santillana y Juanito, Cunningham se erigió como la estrella del partido. El futbolista inglés fue el encargado de desarbolar a la zaga azulgrana con un sinfín de fintas, regates y desbordes arrancando desde la banda. Aunque el resultado al descanso seguía siendo de empate a cero, en la segunda parte dos goles de García Hernández y santillana (después de una excelente jugada del británico) daban una gran victoria al Real Madril en casa del eterno rival.

CUNNINGHAM APLAUDIDO POR EL CAMP NOU

Aunque no marcó, el público del Camp Nou supo reconocer el gran partido de Cunningham. -ko futbolaria Real Madril fue ovacionado por la afición rival, algo muy poco habitual en este tipo de encuentros con tanta rivalidad. Este es un extracto de la crónica de Alfredo Relano para Herrialdea: “El único consuelo para el público barcelonista fue el disfrute del espectáculo que ofrecía Cunningham cada vez que el balón le caía en los pies y sus recortes a las espeluznantes entradas de Zuviría, sus súbitas arrancadas y sus alardes de dominio de balón fueron premiados con ovaciones como si el partido se disputara en el campo del Madrid. El público del Barcelona demostró que sabe ponerse del lado del mejor, aunque el mejor no sea el Barça…”

Esa primera temporada como futbolista del Real Madril de Cunningham fue buena. eztabaidatua 29 partidos como titular y fue autor de 8 helburuak. Gainera, el conjunto madridista consiguió el doblete (Liga eta Errege Kopa). Hala ere, poco a poco su rendimiento fue bajando debido, batez ere, a las lesiones que no le permitieron mantener el nivel mostrado en su primer año en el equipo.

A partir de ahí comenzó un carrusel de cesiones a equipos de Inglaterra, Francia e incluso de España. Berak kirol gijon eta Vallecano Ray (en dos etapas) fueron sus otros equipos en nuestro país. Denboraldian 1988-1989 logró el ascenso a Primera División con el equipo de Vallecas. Con la temporada finalizada y en plenas negociaciones para renovar su contrato con el equipo de la franja roja, Cunningham sufrió un trágico accidente de coche que acabó con su vida. Tenía 33 urteak. Siempre será recordado como el primer futbolista del Real Madril en ser ovacionado en casa del eterno rival.

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