Inglaterra y Escocia, una rivalidad que va más allá del fútbol (Pinterest)
La rivalidad entre Inglaterra y Escocia es algo que va más allá del fútbol. No en vano, ambas selecciones disputaron el primer partido internacional de la historia de este deporte allá por 1872 (aunque parece que un par de años antes ya tuvo lugar un partido entre las dos), en concreto un 30 de noviembre en la ciudad escocesa de Partick. El resultado final fue de empate a cero goles.
Desde entonces, aunque pueda parecer lo contrario, existe igualdad en los enfrentamientos directos entre ambos combinados nacionales. En un total de 111 partidos, los ingleses han ganado 45 por 41 de los escoceses finalizando en empate un total de 24.
En el año 1884 se creó el British Home Championshipen el que participaban Inglaterra, Escocia, Gales e Irlanda (a partir de 1950 es Irlanda del Norte la que los disputaba). La primera gran victoria escocesa sobre sus Auld Enemies (viejos enemigos) de Inglaterra se produjo en 1928. Los ‘Scots’ fueron capaces de derrotar a su máximo rival por un contundente 1-5. A pesar de todo, el campeón del torneo ese año fue Gales.
ESCOCIA GANA A INGLATERRA EN WEMBLEY
Fue en 1977 cuando Escocia logró, quizás, la victoria más importante sobre su gran enemigo. Nuevamente en el British Home Championship ambas seleccione se jugaban el título. Si vencía Inglaterra lo compartía con Gales, si el encuentro finalizaba en empate eran los galeses los ganadores y si la victoria era para Escocia eran los escoceses los campeones. El escenario no podía ser más motivador: El estadio de Wembley.
La victoria visitante por 1-2 hizo que la Tartan Army (afición escocesa) invadiera el terreno de juego para festejar un triunfo histórico. Las imágenes de los hinchas subidos a las porterías (que acabaron tronchadas) dieron la vuelta al mundo y han pasado a la historia de los partidos entre Inglaterra y Escocia.
Los hinchas escoceses invadieron el terreno de juego de Wembley en 1977 (Panenka)
Desde el año 1989 únicamente se han enfrentado en tres ocasiones a nivel absoluto. El último enfrentamiento oficial fue en 1999 en una eliminatoria de repesca para clasificarse para la Eurocopa del año 2000. En el partido de ida Inglaterra venció en Escocia por 0-2 con doblete de Paul Scholes. Por su parte, los escoceses lograron una histórica victoria (aunque insuficiente) en el partido de vuelta disputado en Wembley por 0-1 con un tanto de Don Hutchinson.
En 1996, en la Eurocopa organizada por Inglaterra, el destino quiso que Inglaterra y Escocia quedaran encuadradas en el mismo grupo. La victoria, una vez más en Wembley, fue para los ingleses por 2-0 con tantos de Alan Shearer y Paul Gascoigne.
