El fútbol moderno, de los escudos a los logos

Hace tiempo que quería sentarme a escribir sobre un tema que me tiene bastante preocupado que tiene que ver con el fútbol moderno. Y por lo que veo y leo en redes sociales parece que no soy el único.

El fútbol moderno, como ya hemos repetido en innumerables ocasiones, ya no se parece prácticamente en nada al de nuestros padres y abuelos. El negocio se ha apoderado por completo de este deporte y parece que ya no respeta a nada ni a nadie con tal de lograr más ingresos.

Atrás quedaron esas tardes de domingo pegado a la radio para vivir unas horas de emoción con casi todos los partidos de la jornada jugándose a la vez. Esas camisetas impolutas sin publicidad que hacían muy reconocibles a todos los equipos. Esas plantillas que apenas sufrían modificaciones de un año a otro con alineaciones que prácticamente se cantaban de carrerilla.

No pretendo ser un hipócrita ni quedarme anclado en el pasado y comprendo que todo aquello forma parte de la historia y que, como todo en esta vida, el fútbol tiene que evolucionar y que no todas las innovaciones que se han ido añadiendo son negativas. Pero lo que está claro es que los clubes cada vez se están ‘prostituyendo’ más y esto no parece tener fin.

El fútbol moderno, el fútbol negocio

Por supuesto que lo de la publicidad en las camisetas hace tiempo que es una batalla perdida e incluso los equipos que más resistieron (Barça y Athletic Club por ejemplo) ya se han bajado los patalones hace tiempo. Antes el estadio del Atlético de Madrid recibía el nombre de un ilustre presidente del club, Vicente Calderón, ahora su nueva casa es el Wanda-Metropolitano (con lo bien que hubiera quedado Estadio Luis Aragonés).

Son solo algunos ejemplos pero hay muchísimos más. Por si fuera poco, comenzamos a disputar partidos como la final de la Supercopa de España en otro país y alguno pretende que también se jueguen partidos de la Liga en el extranjero. Pero cuando parecía que ya habíamos tocado fondo en esto de los nuevos tiempos, resulta que no, que aún se podía caer más bajo y tocar lo más sagrado de un club: el escudo.

El escudo del Atleti

Son muchos los clubes de toda Europa y del resto de mundo que ya han ‘modernizado’ su logo. Y digo logo porque eso es lo que es. Los clubes de fútbol hace mucho tiempo que son empresas y como tal parecen decididos a adaptar su imagen a la nueva era digital y de las redes sociales, tal y como ellos mismos han explicado en numerosas ocasiones.

En Inglaterra ya han sido varios clubes como el West Ham United los que han dado un giro radical a sus ‘escudos’ convirtiéndolos en ‘logos’. En España, uno de los casos más sangrantes es el del Atlético de Madrid, cuya afición se encuentra indignada y peleando por recuperar el de toda la vida, y ahora parece que el FC Barcelona será el próximo.

El caso del conjunto culé es realmente llamativo ya que su ‘modernización’ es, básicamente, eliminar las iniciales de su actual escudo (FCB) y poco más. ¿De verdad ese cambio es tan fundamental y necesario para que el club gane seguidores en Twitter e Instagram? ¿Hasta este punto vamos a llegar?

Por suerte, el socio culé ha paralizado esta iniciativa, al menos de momento aunque, ojalá me equivoque, terminaremos viendo ese nuevo emblema en la camiseta del Barça al igual que veremos rebautizado el Camp Nou acompañado del nombre de alguna importante marca.

Sin embargo, el caso más grave y que merece una mención especial es el de la Juventus. El conjunto italiano ha borrado de un plumazo la historia de su escudo y lo ha sustituido por una atrocidad de logo como si de una empresa se tratara (al fin y al cabo es lo que son hoy en día los clubes).