Última actualización abril 11, 2019 por Javier Argudo
A muchos puede sorprender el hecho de que el Palamós CF sea el club más antiguo del fútbol catalán, pero así es. De hecho, su fundación en 1898 le convierte en el tercero de España, únicamente por detrás del Recreativo de Huelva y Athletic Club de Bilbao (también del Sevilla FC dando por buena su fundación en 1890 y no 1905).
Hoy queremos recordar la época dorada del Palamós CF que logró un histórico ascenso en la temporada 1988-1989 a Segunda División en la que permaneció durante 6 temporadas de forma consecutiva.
Lejos de conformarse con la permanencia, el equipo catalán firmó la mejor clasificación de su historia (8º) en su primera campaña en la categoría de plata. De hecho, estuvo muy cerca de los puestos que daban acceso a la promoción de ascenso a Primera División. El RCD Espanyol (que lograría ascender) únicamente sumó 2 puntos más que el Palamós.
A partir de esa histórica temporada 1989-1990 las cosas se fueron complicando y poco a poco el equipo fue bajando en la clasificación en los años posteriores. Eso sí, el objetivo de la permanencia se fue cumpliendo año tras año.
PUCHE II, ÚNICO PICHICHI DEL PALAMÓS CF
La temporada 1994-1995 dejó un sabor amargo con el descenso a Segunda División B cerrando la mejor etapa de la historia del club, sin embargo, dentro de lo malo, ese año se logró un nuevo hito histórico del Palamós CF.
Fue la temporada en la que Antonio Puche Vicente, conocido futbolísticamente como Puche II debido a que su hermano mayor era conocido como Puche I, se proclamó Pichichi de Segunda División con 21 goles.
Una temporada antes había sido otro histórico como Roberto Martínez el que se había quedado cerca del trofeo Pichichi al sumar 18 con la camiseta azul y amarilla en la 1993-1994.
Esperemos volver a ver pronto a un histórico de nuestro fútbol en las primeras categorías ya que los que conocimos este deporte en los años 90 siempre hemos sentido un cariño especial por este club así como por otros como el Figueres, Burgos, Sestao y un largo etcétera.