Última actualización noviembre 19, 2019 por Javier Argudo
Hoy queremos dedicar unas líneas a uno de los grandes goleadores de los años 90 en la Liga española que destacó sobre todo en la categoría de plata aunque también fue capaz de anotar en Primera en varios clubes. Su nombre, Daniel Toribio Aquino.
Nacido un 9 de junio de 1965 (casualmente día de la Día de la Región de Murcia), el atacante argentino destacó en las filas de Banfield donde consiguió el ascenso a Primera División precisamente anotando el gol definitivo. Esto le permitió dar el salto a Europa para enrolarse en las filas del Real Murcia, el club que se convertiría en el más importante en la vida del ‘Toro’.
En Murcia encajó perfectamente tanto en el club como en la ciudad. Se convirtió en el máximo goleador del conjunto grana que por aquel entonces militaba en Segunda División con 15 y 12 goles respectivamente en sus dos primeras temporadas (1989-1990 y 1990-1991). En el mercado invernal de la 1991-1992 le llegó la oportunidad de fichar por el Albacete de Benito Floro de la Primera División aunque no logró marcar más que tres goles.
‘PICHICHI’ EN SEGUNDA DIVISIÓN
Su poco impacto en la máxima categoría le hizo regresar a Segunda donde explotó definitivamente logrando dos trofeos de máximo goleador primero con el Mérida (19 goles) y después con el Real Betis (26). Con el conjunto verdiblanco logró un nuevo ascenso y disfrutó de una nueva oportunidad en la máxima categoría donde hizo 7 goles.
El Rayo Vallecano fue el siguiente club en llamar a la puerta de aquel delantero que la rompía con la zurda y el argentino se marchó a Vallecas donde logró su mejor cifra anotadora en Primera División (14 goles).
REGRESO AL REAL MURCIA
Una temporada y media más en el Albacete antes de regresar al Real Murcia que necesitaba imperiosamente un refuerzo de ese nivel para tratar de salir del pozo de Segunda B. Daniel Toribio Aquino no tuvo problema en bajar a la categoría de bronce para echar una mano al club de su vida. Después de marcar más de 30 goles en dos temporadas y media en esta segunda etapa con la camiseta grana se logró el objetivo y el Real Murcia logró el ascenso en la 1999-2000 con el veterano delantero que ya contaba con 34 años.
Después de alguna temporada más en equipos de inferior categoría de la región murciana, el delantero colgó las botas y echó raíces en la ciudad. Uno de sus hijos, apodado como ‘El Torito’ Aquino, ha seguido sus pasos y también es futbolista profesional. Difícil labor la de superar los números de su padre que fue capaz de jugar 405 partidos oficiales en España y anotar 165 goles.