Última actualización marzo 22, 2019 por Javier Argudo
Fue uno de los finales de liga más emocionantes en lo que respecta a la lucha por la permanencia en Primera División que se recuerdan. Aquella última jornada de la temporada 1984-1985 llegó con dos equipos ya descendidos (Elche y Murcia) pero con otros cuatro que tenían que jugarse todo en el último partido: Málaga, Real Betis, Hércules CF y Real Valladolid. Todos sumaban 28 puntos excepto el conjunto bético que tenía 29.
El destino quiso que Málaga y Betis se enfrentaran en un duelo directo en La Rosaleda. Ambos comenzaban la jornada fuera del descenso con 28 y 29 puntos respectivamente. Por su parte, el Hércules CF, que partía en puestos de descenso, visitaba ni más ni menos que el Santiago Bernabéu para enfrentarse al Real Madrid mientras que el Valladolid visitaba el Sánchez Pizjuán para jugar contra el Sevilla que no se jugaba nada.
EL POSIBLE EMPATE PACTADO ENTRE MÁLAGA Y BETIS
Es aquí cuando comenzó el baile de rumores y de suspicacias. Unos dicen que Málaga y Betis pactaron un empate que les valdría a ambos siempre y cuando el Hércules no ganara al Real Madrid en su estadio. Otros sospechaban que el Sevilla no pondría mucha resistencia en su partido contra el Valladolid para tratar de descender al conjunto verdiblanco.
Sin embargo, la gran sorpresa (y sospecha posterior) se produjo en el Bernabéu donde el Real Madrid, que ya no se jugaba nada ya que ocupaba un paupérrimo quinto puesto, salió derrotado por el Hércules de Mario Alberto Kempes por 0-1 con un gol histórico de Sanabria. Esta victoria herculana provocó que el empate (quien sabe si pactado o no) entre Málaga y Betis le costara el descenso a los malaguistas ya que el Valladolid también venció en Sevilla por 0-2 como era de esperar.
Cuenta la leyenda que el propio Juanito, mítico futbolista del Real Madrid y natural de Fuengirola, montó en cólera con sus compañeros de vestuario después de la derrota contra el Hércules ya que el equipo se su tierra descendió (él no pudo jugar ese último partido). Dos temporadas después el ‘7’ merengue fichó por el Málaga para tratar de ayudar al equipo a ascender de nuevo a Primera División algo que consiguió y además logró dejarlo en la máxima categoría.