Los jugadores del Botafogo disputaron la final contra la Juventus con la camiseta del Dépor (Foto: EFE)
El Trofeo Teresa Herrera es uno de los torneos veraniegos más prestigiosos e importantes del fútbol español. No en vano, es uno de los más antiguos del panorama nacional ya que comenzó a disputarse en el año 1946. Aunque en los últimos años este tipo de torneos han ido perdiendo peso hasta el punto de que cada vez es más complicado sacarlos adelante, el organizado por el RC Deportivo de la Coruña aguanta el tipo.
El Trofeo Teresa Herrera de 1996 dejó una anécdota para el recuerdo
Hoy nos centraremos en la edición del año 1996 que contó con un cartel de mucho nivel, como suele ser habitual en este torneo. Por un lado, el anfitrión RC Deportivo de la Coruña y el Botafogo brasileño disputaron la primera semifinal. Por otro, Juventus de Turín y Ajax de Amsterdam se vieron las caras en la segunda. El ganador de cada uno de los encuentros disputaría la final.
El Botafogo de Brasil fue capaz de vencer al Dépor por un resultado de 1-2. Los deportivistas se adelantaron con un tempranero gol de Txiki Beguiristain de penalti en el minuto 6. Sin embargo, los brasileños fueron capaces de darle al vuelta al marcador con goles de Bentinho y Túlio Costa (estrella del equipo). De esta forma, el conjunto albinegro clasificaba para la final.
En la otra semifinal de aquel Teresa Herrera los dos últimos finalistas de la Champions League debían dilucidar quien se enfrentaría al Botafogo. La Juventus (que ya había vencido a los holandeses la máxima competición del fútbol europeo unos meses antes) no dio opción a su rival y le endosó un humillante 6-0 con un hattrick de Padovano además de los goles de Del Piero, Amoruso y Di Livio. Casi nada.
Pero por lo que realmente aquella edición del Teresa Herrera pasó a la historia fue por la anécdota de la final del torneo. Botafogo y Juventus debían luchar por el título de campeón pero al parecer ambos equipos viajaron con su indumentaria habitual a rayas blanquinegras. La solución (empleada incluso en una Copa del Mundo) fue de andar por casa. El Dépor prestó su camiseta a los brasileños que, eso sí, saltaron al terreno de juego con su pantalón y medias oficiales.
Lógicamente, el público coruñés que asistió a aquella final pronto se sintió identificado con el combinado de Brasil ya que lucían las camisetas del Deportivo de la Coruña. Quien sabe si fue ese el motivo por el cual el Botafogo, contra todo pronóstico, fue capaz de imponerse en la tanda de penaltis a la Vecchia Signora después de un partido espectacular que finalizó con un histórico marcador de empate a 4 goles con prórroga incluida. Los goleadores del conjunto italiano fueron Amoruso (en tres ocasiones) y Vieri. Por parte de los brasileños marcaron Túlio (por partida triple) y França.
De esta forma el Botafogo lograba su primer título de campeón del Teresa Herrera (había sido subcampeón en 1959). Eso sí, los futbolistas recogieron el enorme y prestigioso trofeo ataviados con su camiseta oficial con las franjas blanquinegras.
