Última actualización junio 9, 2020 por Javier Argudo
Hoy trataremos un caso insólito en la historia del fútbol profesional que tiene como protagonista a un futbolista de la selección de Islandia. En concreto, hablaremos del debut de Gudjohnsen, el mejor jugador de la historia de este país.
Viajamos al 24 de abril de 1996. Por aquel entonces, el delantero contaba con 17 años de edad y el seleccionador de Islandia decidió que era el momento de dar entrada a aquella joven promesa. Hasta ahí todo normal, sin embargo, lo que convierten este debut en algo único en la historia es que Eidur Gudjohnsen entró en sustitución de Arnor Gudjohnsen, su padre.
Padre e hijo se fundieron en un abrazo y el progenitor de Eidur le dio un beso cediendo el testigo generacional a su hijo. La idea era que los dos jugaran juntos, sin embargo se pensó que era mejor que esto ocurriera en Islandia por lo que aquella tarde en Tallin (Estonia) el debut de Gudjohnsen fue de esta manera tan curiosa.
El deseo de juntar a padre e hijo en el terreno de juego no pudo llevarse a cabo ya que Arnor (que por aquel entonces sumaba 34 años de edad) sufrió una grave lesión que le hizo abandonar la práctica del fútbol poco después.
MÁXIMO GOLEADOR DE ISLANDIA
A partir de ahí la carrera de Eidur Gudjohnsen fue muy exitosa. El futbolista se convirtió en el máximo goleador de la historia de su selección (26 goles en 88 partidos) la cual logró su primer gran éxito deportivo con él como capitán, la clasificación para le Eurocopa de 2016 en la que estuvo presente con 37 años de edad.
A nivel de clubes Gudjohnsen formó parte de equipos tan importantes como el Chelsea o el FC Barcelona. Con este último logró el triplete (Liga, Copa y Champions) en 2008 bajo las órdenes de Pep Guardiola. De esta manera se convirtió en el primer futbolista de su país en lograr ‘la orejona’.