Última actualización marzo 1, 2020 por Javier Argudo
Hace poco hablábamos sobre los detalles del fichaje de Diego Armando Maradona por el Barça. Su trayectoria y rendimiento en el conjunto culé no fue del todo satisfactorio sobre todo debido al fuerte desembolso económico que supuso (1.200 millones de las antiguas pesetas). Sin embargo, como no podía ser de otra forma, El Pelusa dejó jugadas y partidos para el recuerdo. Hoy recordamos su actuación en el Santiago Bernabéu que le sirvió para salir ovacionado por el público del eterno rival.
Aquel 26 de junio de 1983 se disputó en el feudo madridista el partido de ida de la final de la antigua Copa de la Liga. El FC Barcelona de Diego Armando Maradona logró un buen resultado de 2-2 para afrontar el partido de vuelta con cierta ventaja en el Camp Nou. ‘El 10’ argentino sirvió el primer gol de su equipo a Lobo Carrasco que anotó de cabeza después de un buen centro de su compañero.
EL MEJOR GOL DE DIEGO ARMANDO MARADONA EN EL BARÇA
Sin embargo, el mejor gol de Maradona con la camiseta del Barça estaba por llegar. Tan solo cuatro minutos después los protagonistas del primer tanto culé intercambiaron sus papeles. Carrasco cedió el balón al astro argentino que encaró solo a Agustín, portero del Real Madrid, al que dribló sin mayor dificultad. Cuando simplemente tenía que empujar el esférico al fondo de la portería esperó la llegada de Juan José, defensa merengue, y con una sangre fría espectacular lo dejó pasar de largo antes de hacer el 0-2.
En ese momento el público del Real Madrid supo valorar lo que estaba viendo y, como pasaría años después con Ronaldinho, un futbolista del Barça fue ovacionado por la afición del eterno rival. Los locales supieron sobreponerse y marcaron dos goles por mediación de Del Bosque y Juanito que dejaban la final muy abierta para el partido de vuelta que finalizó con victoria por 2-1 del conjunto azulgrana.
En una entrevista en el diario Olé, Maradona explicaba la jugada: «Me la dio Carrasco en mitad de la cancha, eludí al arquero y esperé a Juan José al que dejé pasar de largo. Se rompió los huevos contra el poste y yo la empujé para adentro. Después nos cruzamos y le pedí perdón. Me mandó a la mierda».
