Última actualización noviembre 24, 2019 por Javier Argudo
Los que conocimos el fútbol en los 80 y comenzamos a disfrutarlo de verdad en los 90 lo recordamos perfectamente. Rafa Paz fue uno de aquellos históricos futbolistas del Sevilla FC que llegó a ser convocado por España en el Mundial de Italia 1990.
Como tantos otros jugadores de aquellos maravillosos años, Rafa Paz tenía ese aspecto de ‘señor mayor’ que contrasta totalmente con los futbolistas de la actualidad. A pesar de su juventud, el centrocampista natural de Granada, sufría una alopecia importante. Precisamente en una entrevista concedida al diario ABC de Sevilla, el protagonista de este artículo contaba varias anécdotas. Una de ellas trataba de su frustrante trasplante de pelo.
Coincidiendo con la llegada de Carlos Bilardo al club hispalense, Rafa Paz acudió a una clínica para someterse a dicho trasplante. Según él mismo cuenta, todavía tenía dolor en la cabeza por lo que los primeros entrenamientos de pretemporada evitaba golpear el balón con la testa. Obviamente, este hecho no pasó desapercibido para el técnico argentino.
Esto es lo último que me quedaba por ver en el fútbol»
Cuando Bilardo preguntó a Rafa Paz el motivo por el que no cabeceaba el balón y supo la respuesta, no lo podía creer: «Esto es lo último que me quedaba por ver en el fútbol». Ante las lógicas risas y cachondeo del resto de la plantilla.
Precisamente sobre Bilardo contó más cosas el que llegara a ser capitán del equipo durante muchas temporadas: «Un día íbamos ganando por 0-1 y faltaba muy poco tiempo para acabar el partido en Zaragoza. Tuvimos una falta a favor y yo en vez de dejar correr el tiempo vi desmarcado a Marcos y saqué rápidamente. Perdimos la pelota y nos empataron».
El asunto no quedó ahí ya que cuatro días después sonó el teléfono en casa de Rafa Paz: «Eran las cuatro de la madrugada. Me asusté. Era Bilardo que me dijo: «¿Rafa, como pudiste sacar así esa falta?» El fútbol era su vida y siempre lo tenía en la cabeza. Era un fenómeno, cuidaba todos los detalles».
UN CLÁSICO DEL SEVILLA FC
La carrera de Rafa Paz en el Sevilla fue de lo más dilatada. El capitán permaneció en la disciplina sevillista durante 14 temporadas sumando 380 partidos oficiales en los que anotó 27 goles. Además, fue internacional con España en 7 ocasiones, 2 de ellas en el ya citado Mundial de Italia ’90.
Sin embargo, antes de colgar las botas, decidió probar una nueva experiencia en su carrera. Coincidiendo con el descenso del Sevilla a Segunda División en la temporada 1996-1997, el granadino firmó un contrato con el Atlético Celaya mexicano. Allí coincidió con otros futbolistas españoles como Emilio Butragueño y Rafael Martín Vázquez. Al terminar la campaña 1997-1998 decidió colgar las botas. Sin duda, uno de esos ‘clásicos’ de nuestra infancia.