Última actualización marzo 26, 2019 por Javier Argudo
La carrera de Pepe Mel como futbolista tiene varias curiosidades que llaman la atención a simple vista. Una de las más llamativas es la de su única temporada en Primera División en la que finalizó colista con su equipo pero luchó por ser Pichichi.
El futbolista madrileño anotó 34 goles en el Alcalá en Segunda B lo que le sirvió para ser fichado por el Real Madrid para su filial. En las filas del Castilla trató de hacerse con un hueco aunque nunca fue titular indiscutible A pesar de ello, al finalizar la temporada 1986-1987 y aprovechando que el conjunto merengue lo dejó libre, Osasuna se hizo con sus servicios para jugar en Primera División.
Lo más curioso del asunto es que Pepe Mel no llegó a disputar ningún partido con los rojillos debido a una lesión primero y a que después jugadores como Michael Robinson y el jugador del filial Cuco Ziganda le cerraron las puertas. Se marchó de Osasuna agradecido pero algo dolido: «He perdido tiempo y dinero pero estoy a tiempo de recuperarlo» dijo.
Mel fichó por el CD Castellón de Segunda División y fue aquí donde recuperó el olfato goleador. En su segunda temporada en Castalia logró el ascenso con la camiseta albinegra y anotó 21 tantos quedando solo por detrás del racinguista Quique Estebaranz que hizo 23.
PEPE MEL PICHICHI
Sin embargo, el atacante madrileño decidió fichar por el Real Betis y seguir en Segunda. En el conjunto verdiblanco volvió a mantener su nivel goleador y esta vez sí fue Pichichi de la categoría de plata con 22 goles y logró un nuevo ascenso.
Por fin tendría la oportunidad de jugar en Primera y demostrar que era válido para la categoría. Y en realidad lo demostró aunque la temporada no pudo ser más extraña. El ‘9’ del Real Betis fue capaz de marcar 14 goles y quedó muy cerca del máximo goleador que esa temporada fue Emilio Butragueño con 19. Sin embargo, su equipo finalizó como colista destacado y descendió nuevamente.
La siguiente temporada jugó muy poco y solo anotó tres goles con el Betis por lo que hizo las maletas y decidió que era el momento de regresar a Segunda B. Granada, Benidorm, Getafe y Écija fueron sus destinos y se convirtió en uno de los mayores cañoneros de la categoría. Precisamente con el Getafe marcó goles muy importantes sobre todo el hat trick al Huesca en el partido de promoción por la permanencia.
Finalmente colgó las botas no sin antes acumular una última experiencia en el extranjero concretamente en el Angers francés. Siempre podrá decir que en su única temporada en Primera División hizo buenos números y compitió el Pichichi precisamente con Butragueño, el delantero al que sustituyó en el Castilla después de que este ascendiera al primer equipo madridista.