Última actualización marzo 22, 2024 por colgadosporelfutbol
La historia del FC Barcelona es la de un club especial. El gigante en que se ha convertido en la actualidad (y ya desde hace muchos años) pasó su peor época en la década de los 30 en una España que atravesaba una crisis política que derivaría en una guerra civil.
La historia del Barça antes y después de la Guerra Civil española
El conjunto azulgrana había gozado de una época de gran esplendor en los primeros años de existencia. Desde su fundación por parte de Joan Gamper y durante la década de 1920, el Barça consiguió una gran cantidad de títulos y trofeos (entre ellos 8 Copas de España y la primera Liga de la historia).
Sin embargo, con el estallido de la Guerra Civil todo cambió para mal en el club culé. Las autoridades ya habían cerrado las puertas del estadio durante 6 meses por los silbidos al himno (sí, esto tampoco es de ahora) y habían condenado a Gamper al exilio, algo que le produjo una gran depresión. Este hecho, unido al conocido como ‘crack’ bursátil del 29 provocó que el fundador del club acabara quitándose la vida.
Los bombardeos sobre la ciudad de Barcelona eran continuos por parte de los aliados italianos afines a Francisco Franco que volaban desde Mallorca debido a que la ciudad Condal apoyaba la democracia y los ideales de la República. El presidente del club, Lluís Suñol, fue asesinado por los fascistas y la sede del club quedó destrozada después de los bombardeos de marzo de 1938 en el que murieron más de 1.000 personas.
Josep Cubells, el responsable del trofeo más especial del Barça en su historia
Es aquí donde cobra una especial importancia la figura de Josep Cubells, conserje de la entidad en aquella época. En pleno ‘shock’ por lo sucedido se apresuró a tratar de recuperar la mayor parte de los documentos, trofeos (que quedaron prácticamente destrozados por los proyectiles) así como el dinero en efectivo (unas 2.500 pesetas de la época).
Gracias a la labor de Cubells, el FC Barcelona pudo conservar la mayor parte de sus primeros 40 años de historia. Los restos de los casi 300 trofeos recuperados por el fiel empleado barcelonista fueron fundidos y con ellos se creó la llamada ‘Copa de Todos’, una escultura conmemorativa.
Sin embargo, lo más curioso de este asunto es que este trofeo permaneció olvidado durante muchos años en uno de los almacenes del club sin darle demasiada importancia. De hecho, incluso nos ha sido complicado encontrar una foto del trofeo que, por fin, reposa en el museo del Barça.